Mousse proteico de Lidl ¿Es realmente interesante?
Como ya comenté en un vídeo anterior, que un producto se venda bajo la etiqueta de "alto en proteínas" no quiere decir que automáticamente sea saludable o interesante para nuestra dieta. Hoy vamos a ver otro claro ejemplo con el mousse proteico de la marca Milbona que se vende en los supermercados Lidl.
Y es que debemos estar siempre atentos a lo que compramos porque fácilmente "nos la pueden colar". De hecho, este producto lo compré por equivocación el otro día pensando que era un pudding proteico de chocolate (un producto que sí es más interesante), ya que tienen un formato muy similar.
Pero al llegar a casa y examinarlo con más detenimiento, vi que era otro producto nuevo que no conocía, así que procedí a echarle un vistazo a los ingredientes y valores nutricionales.
Aquí fue cuando me di cuenta que no era una buena opción.
Si nos vamos a los ingredientes podremos ver que los tres primeros son la nata, agua y azúcar, a diferencia del pudding proteico de esta misma marca, que tiene como tres primeros ingredientes la leche desnatada, proteína de la leche y nata.
Esto ya nos hace suponer que el contenido en azúcares de este postre va a ser más elevado de lo que podríamos pensar en un primer momento.
Y, efectivamente, así es; podemos ver que por cada 100 gramos contiene más de 12 gramos de azúcares; el triple que el pudding (que tiene 4 gramos de azúcares por cada 100 gramos de producto, al solo contener los azúcares naturalmente presentes en la leche), lo que hacen un total de 22 gramos de azúcares por envase.
Siguiendo con la comparativa entre ambos productos, ambos tienen una cantidad similar de proteínas (por cada 100 gramos), pero el mousse proteico contiene una mayor cantidad de grasas respecto al pudding proteico (5,4 g vs 1,5 g por cada 100 gramos), lo cual tiene una incidencia directa en el aporte energético, siendo de 145 kcal / 100 gramos en el mousse y 76 kcal / 100 gramos en el pudding, es decir, prácticamente el doble de calorías.
Por tanto, estamos simplemente ante un postre con un alto contenido en proteínas pero con un contenido también considerable en azúcares añadidos, haciendo que esta opción no sea tan interesante.
Mi recomendación es que si algún día queremos darnos un gusto con un postre rico y "matar el gusanillo" de dulce, optemos por los puddings proteicos de este mismo supermercado (disponibles en múltiples sabores), que nos aportan también una cantidad de proteínas importante pero una mucho menor cantidad de azúcares.
